Acerca de su hijo, ¿Qué es lo verdaderamente importante para una madre?
Ante la noticia de un embarazo, son múltiples las preguntas que se hacen a los futuros papás. ¿Es niño o niña?, ¿es buscado?, ¿cuándo nacerá?, ¿cómo os vais a organizar? Y así un largo etcétera. Una vez que nace, la crianza del nuevo miembro de la familia coloca a los padres ante multitud de novedades. En este recorrido, ¿qué valora cada uno como más importante en la vida de sus hijos?
Antes del nacimiento de un hijo, ese hijo ya existe. Durante el embarazo, o incluso antes, ya se están gestando muchas cosas acerca de cómo será ese niño o niña que nacerá. Los padres imaginan cada futuro acontecimiento. Piensan en los cuidados que se le dará a ese niño, cuidados de aseo, de afecto, educacionales. Piensan en qué será de mayor, si será inteligente, listo, simpático, respetuoso… Pero ¿qué ocurre si las cosas no marchan como esperamos?
Nos gustaría acercaros a un vídeo que recoge las palabras de 14 madres hablando sobre aquello que es verdaderamente importante para ellas con respecto a sus hijos. Siete de ellas tienen hijos discapacitados. Es curiosa la diferencia en los discursos de unas y de otras. Mientras que unas se centran en aspectos que tienen que ver con lo que podríamos llamar “virtudes y logros sociales”, otras simplemente hablan de lo emocional, de la importancia de una sonrisa, de un abrazo, de la comunicación, del ser feliz.
Hoy en día, la sociedad nos exige ser los mejores y llegar lejos, nos estimula en la competitividad, y como es esperado, tendemos a fomentar estos valores en nuestros hijos. Queremos que lleguen a ser los mejores, que les vaya bien en el colegio, en el instituto, en la universidad, que estudien idiomas para conseguir un buen trabajo. Les motivamos para que realicen actividades extraescolares y así puedan ser buenos músicos, bailarines o deportistas. Sus días están completos para que tengan donde elegir y puedan conseguir aquello que se proponen.
Hay multitud de alternativas y los padres pueden sentirse tristes o decepcionados porque su hijo no logró aquello que se propuso. Pero son cuestiones que se toleran y mejor o peor, se terminan aceptando.
Pero el vídeo nos acerca también a casos que no tienen nada que ver con esto. Ante el nacimiento de un hijo enfermo o con discapacidad, la situación se complica enormemente. Las circunstancias a las que se enfrentan son totalmente nuevas y muy dolorosas. El lugar central lo ocupa la enfermedad y su cura, y el resto pasa a un segundo plano. Todo aquello que habíamos construido psíquicamente sobre el crecimiento y desarrollo de nuestro hijo hay que dejarlo a un lado. Ya da igual el partido de fútbol de los domingos o a qué colegio irá. Es impresionante la importancia que cobra una “simple” sonrisa o unas palabras por parte de estos niños a sus padres.
Quizás sería muy bueno que estas madres y padres pudiesen disponer de un espacio terapéutico propio en el que poder pensar acerca de su sentir y de la angustia que deben experimentar en algunos momentos.
¿Qué sienten estos padres?, ¿qué percepción tiene ellos de qué es lo que necesitan?, ¿cómo calmar su dolor y su angustia?